[Reseña] “Max Steel”: Repitiendo la fórmula

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Tras varias películas animadas, series de televisión y un éxito de ventas navideñas, “Max Steel”, el famoso juguete de Mattel, llega a la pantalla grande en su primera adaptación cinematográfica, un filme dirigido por Stewart Hendler y que protagonizan Ben Winchell, Josh Brener, Ana Villafañe y María Bello.

Sinopsis: Cuando el adolescente Max McGrath descubre que su cuerpo puede generar la energía más poderosa del universo, debe unirse con el único ser capaz de contenerlo – un misterioso extraterrestre techno-orgánico llamado Steel. Unidos como el superhéroe Max Steel, los dos amigos, han de combatir una amenaza alienígena y desbloquear los secretos de su pasado.

Cuando pensé en ver “Max Steel”, pensé que vería la adaptación cinematográfica del personaje con el que solía jugar mi hermano chico, aquella figura de acción que trataba de un fanático de los deportes extremos que luchaba contra Elementor, un monstruo que tenía el poder de controlar todos los elementos del mundo.  Pues resulta que estaba equivocado. “Max Steel”, la película que recientemente llegó a cartelera de cines, se basa en la serie animada que significó el reboot de la historia del personaje, ahora Max es un adolescente que descubre que puede producir energía, quizás demasiada, tanta que sin la ayuda de un alienígena llamado Steel, podría hacerlo explotar.

Utilizando la misma fórmula que la primera “Transformers” (2007), la película nos presenta a un joven que no entiende mucho qué está pasando, un alienígena que apoya con su cuota de entretención y a una chica bonita que no aporta mucho en la trama, aunque claro, no creo que la hayan puesto por eso.  Una fórmula que mágicamente funciona, otorgando un producto bastante disfrutable para el espectador.

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Con una historia precisa, la película cuenta con varios momentos de acción y otros de comedia, gracias a una efectiva inclusión del personaje Steel, un extraterrestre que llega a ayudar a Max para desenmascarar las preguntas de su pasado.

Sin actuaciones destacables, el filme se sostiene gracias a sus buenas escenas de acción y lo rápido que avanza su trama.  Lo que sí sorprende es el parecido del actor Ben Winchell con el de la figura de acción de Mattel. ¡Es idéntico al personaje!

“Max Steel” no es la gran película, pero tampoco es una decepción; cumple con su cuota de acción, de entretención y es una efectiva presentación para los personajes. Una cinta que, si hubiese llegado unos años antes, hubiese sido todo un éxito. Lamentablemente llegó muy tarde, y hoy en día se siente como “una más” dentro de la cartelera. 

¿Mi recomendación? Vaya a verla si le interesa ver una película ligerita, pero con la que pasará un buen rato.

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