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Basada en el libro escrito por W. Bruce Cameron, autor de la saga “La Razón de Estar Contigo«, llega una nueva aventura que te hará reír y llorar con la tierna e implacable odisea que emprenderá una perrita, con tal de regresar a casa junto a su familia en “Mis Huellas a Casa”.
Charles Martin Smith, el mismo director de “Winter El Delfín” (2011), se encarga de dirigir esta hermosa película protagonizada enteramente por un animal, donde Smith demuestra toda su experiencia en este género; uno de los más emotivos y complejos de llevar a cabo. Para ello, el cineasta se apoya de un elenco de conocidos actores, que incluye a Ashley Judd (La Serie Divergente: Leal), Jonah Hauer-King (La Miniserie Mujercitas), Barry Watson (7th Heaven), Alexandra Shipp (X-Men: Apocalipsis), y la voz de Bryce Dallas Howard (Jurassic World), en la versión original en inglés.
Sinopsis: La historia en este filme se centra en Bella (Howard), una can con muchas energías que gasta en jugar con su amo y en perseguir ardillas. Debido a un accidente, Bella se separa de su familia humana por lo que para regresar a ella tendrá que realizar un épico trayecto de más de 600 kilómetros. En este viaje vivirá muchas aventuras y conocerá a otros personajes (humanos y animales) que le ayudarán a seguir su destino.
«Mis Huellas a Casa» está dirigida tanto a los amantes de los animales como a los doglovers, pero en especial: a la familia; ya que la narración corre por cuenta de Bella (Howard), la adorable perrita mezcla de pitbull , que va relatando su versión de la historia al igual que un niño, llena de ingenuidad y dulzura. Mientras que en contraste con el eje central de la película, nos encontramos con la versión adulta/humana que corre por cuenta de los actores.
La cinta parte lento presentando los hechos que dan pie a la trama, tomándose todo el tiempo del mundo para seguir el largo viaje que emprende Bella; lo cual hace que a ratos decaiga en su ritmo y energía, volviéndose un poco plana después de unos minutos. Esto es más que necesario para añadir la cuota de emoción y consternación de la que somos testigos, sin embargo, podría afecta la atención del espectador, en especial si hablamos de un niño.
Una de las cosas más destacables de «Mis Huellas a Casa» es la constancia y perseverancia de nuestra protagonista, quien pese a toda adversidad, mantiene la esperanza de volver a casa. Una cruda experiencia que no deja indiferente a nadie, tocando la fibra sensible de todo aquel que tenga corazón -tenga o no mascota-.
Con una cuidadosa fotografía, el director nos adentra en los bosques del estado de Colorado, envolviendo la cinta en una atmósfera de tranquilidad, con sus parajes y sonidos. Algo que sin duda distrae del eje central de la historia, dándonos breves momentos de paz para no fatigar al espectador con la agotadora odisea de Bella.
«Mis Huellas a Casa» es un bella película animalista. Ideal para compartir en familia, y que te dejará con los sentimientos a flor de piel, así que más les vale ir preparados con un par de pañuelos desechables, porque además de sentir ternura por Bella y reír con sus juegos e ingenuidad, las lágrimas se harán sentir.
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