«Young Sheldon»: Cómica, sorprendentemente cómica

Tiempo estimado de lectura: 3minutos, 53segundos

Tras un exitoso episodio de estreno, Warner Channel confirmó rápidamente la realización completa de la primera temporada de «Young Sheldon», el primer spin-off de «The Big Bang Theory«, enfocado en la niñez del extravagante Sheldon Cooper. Ahora, el canal emitirá su segundo episodio (y los siguientes) a partir de este domingo 05 de noviembre, y de ahí en adelante todos los domingos a las 21 hrs.

Gracias a Warner Channel tuve la posibilidad de ver los dos siguientes episodios de la primera temporada (es decir, el 01×02 y 01×03), y debo decir que la serie está entretenídisima. Con buenos personajes, situaciones alocadas y un protagonista adorable, que a la vez sorprende con su actuación; el spin-off será todo un deleite para los fanáticos de «The Big Bang Theory».

Sinopsis: Aunque tiene nueve años, no es un niño normal. No juega como los de su edad, viste como un adulto y cursa varios años adelantado debido a su inteligencia. Aun así, es un niño absolutamente feliz. Nadie como él usó su fascinación por los trenes para comprobar empíricamente las leyes de Newton; pocos tienen una foto de Albert Einstein en el techo de su habitación para observarla antes de dormir; o casi nadie disfruta como él de la televisión para ver las enseñanzas científicas del profesor Protón. Tampoco le complica ir en el mismo curso de su hermano mayor, ya que lejos de sentirse intimidado por algún tipo de acoso escolar, él piensa firmemente que sus compañeros no tardarán en reconocer su inteligencia y lo aceptarán como un líder.

Quizás si esa inocencia sea lo que más le preocupa a su madre, Mary, quién no ve en él a la lumbrera científica que trabajará en el futuro la Teoría de Cuerdas, sino a un niño que necesita resguardo, cariño y llevar una vida como la de cualquiera de los niños que corren a través de las calles y jardines del vecindario. Como buena cristiana se encomendará a sus mejores oraciones para acompañar a Shelly en los márgenes más cercanos a la normalidad.

Con sus protagonistas ya presentados, el segundo episodio de la serie parte sin problemas… presentando al joven Sheldon Cooper en la escuela, mientras sus padres lo ven y sufren por su falta de amigos; he ahí que, para hacer amigos, Sheldon hará lo que mejor sabe hacer: leerá un libro e investigará qué tan difícil es conseguir uno. Un episodio hilarante, repleto de comedia y situaciones muy entretenidas. En otras palabras: el episodio perfecto para enganchar definitivamente con la serie.

El tercer episodio tampoco pierde la gracia, presentándonos el comienzo de la rivalidad entre Sheldon y el padre de la iglesia a la que va su madre. Porque Sheldon es un hombre de ciencia, y por ello… no cree en Dios. El capítulo también posee otra trama, pero no seguiré ahondando en ella, para evitar los spoilers.

Lo cierto es que tras ver el primer episodio no estaba muy convencido con «Young Sheldon», considero que es bastante difícil hacer una serie precuela de un personaje tan fuertemente marcado como es Sheldon Cooper; pero la verdad es que la actuación del pequeño Iain Armitage (Big Little Lies) sabe ponerse a la altura de su versión adulta, presentando a un adorable protagonista… que los mantendrá entretenidos durante los 20 minutos aprox. por episodio.

Una infancia que aprovecha la oportunidad para presentarnos a nuevos personajes, sabemos un poco de ellos, pero no toda la historia; y he ahí que tenemos una nueva familia con la que encariñarnos.

La presencia de la voz de Jim Parsons (el Sheldon adulto) en cada episodio nos recuerda la fuerte conexión que tiene (y tendrá) esta nueva serie con respecto a la idea original. Algo tan bueno, como malo. Y es que el único (y principal) problema que posee «Young Sheldon» es ese inevitable enlace con los sucesos que sabemos ocurrirán en la infancia del personaje. Debido a eso, aquellos que no han visto «The Big Bang Theory» tienen probabilidad de «quedar colgados» en más de una ocasión.

«Young Sheldon» es una muy interesante nueva apuesta. Cómica, tan cómica que llega a sorprender a los más escépticos, y lo que parece ser… un nuevo éxito de Chuck Lorre, el creador de la serie original y comedias de Warner como: «Two And a Half Men«, «Mom» y «Mike & Molly«.

Sin comentarios

Deja una respuesta