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«El Esquema Fenicio» marca el regreso del aclamado director Wes Anderson a la pantalla grande, tras su éxito con Asteroid City (2023) y su premiado cortometraje La maravillosa historia de Henry Sugar (2023), con el cual obtuvo su primer Oscar. En esta ocasión, Anderson nos invita a sumergirnos en una historia de espionaje, tejida con su característico sello visual y su humor melancólico tan único.
Sinopsis: La historia de una familia y una empresa familiar.
Esta vez, la trama adquiere un tono más profundo y personal al explorar las complejas relaciones familiares entre un padre y sus hijos, centrándose especialmente en su primogénita, a quien pretende nombrar heredera de todos sus bienes.
Benicio del Toro interpreta a Zsa Zsa Korda, un empresario corrupto, sumamente calculador y egoísta, cuyo único objetivo es alcanzar el éxito a toda costa, sin importar los medios ni las consecuencias. Esta forma despiadada de hacer negocios le ha creado múltiples enemigos, que han intentado asesinarlo sin éxito. Es por ello que decide reconectar con su hija Liesl (interpretada por Mia Threapleton), quien está a punto de tomar los votos religiosos, pero decide considerar la propuesta de su padre, movida tanto por la curiosidad como por los traumas de su pasado que aún busca resolver. Así, ambos, con sus propias agendas, empiezan a descubrir facetas más profundas del otro, lo que les permite explorar su relación y, finalmente, reconectar.
Esta historia se presenta como una de las más distintas dentro del universo de Anderson en los últimos años, y también una de las más conmovedoras, por la forma en que explora la relación entre estos personajes. A lo largo de la película, se mantienen los toques característicos del director: un humor peculiar, personajes que constantemente se cuestionan y desafían entre sí, hasta alcanzar finalmente un punto de encuentro y redención.
La fórmula visual y estética de Anderson, que ya conocemos, sigue funcionando como un refugio cómodo, no necesariamente como una novedad, pero de una manera igualmente efectiva.
Un aspecto interesante de la película es la música, que desempeña un papel estético fundamental. Esta vez, Anderson recurrió a una serie de piezas clásicas del compositor Igor Stravinsky, que son reveladas de manera destacada en los créditos, subrayando una vez más la profunda conexión emocional del autor con la cinta.
Aunque aparecen múltiples rostros conocidos que habitualmente colaboran con el director, sus roles en esta película son menores, funcionando más como cameos que como personajes centrales. La verdadera fuerza de la historia recae en el dúo protagónico formado por Benicio del Toro y Mia Threapleton, quienes guían la película a través de su relación, que se va descongelando lentamente, permitiéndoles, a la vez, descubrir sus propias motivaciones.
La película llegará a los cines gracias a Andes Films a partir de este 5 de junio.
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