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Elizabeth Halsey es una profesora bastante peculiar. Usa lenguaje ofensivo con sus estudiantes, se droga y emborracha en horas de trabajo y hace de todo, menos enseñar. Su único deseo es casarse con un “chico rico” y ser mantenida. Pero tras ser dejada por su novio, hará todo lo posible por conquistar al guapo y adinerado nuevo profesor sustituto de la escuela, Scott Delacorte. Su colegaAmy Squirrel también entra en la competencia por el codiciado profesor, mientras que el maestro de deportes Russell Gettis intenta hacer su jugada con Elizabeth.
“Malas Enseñanzas” es una comedia que se aparta de los márgenes típicos del género. Con un sentido de humor un poco más elevado; más irreverente, sarcástico e irónico. Donde la crítica al sistema educacional estadounidense no se deja esperar. Retratando a la perfección los polos opuestos, y obviamente exagerados, de la calidad educacional en las escuelas públicas por parte del profesorado.
La dirección está a cargo de Jake Kasdan (Orange County), mientras que el guión es responsabilidad de Gene Stupnitsky y Lee Eisenberg (Año Uno), quienes ya han colaborado juntos en la serie: “The Office”. La dupla logra construir personajes sólidos en una trama que se desenvuelve con naturalidad dentro de un paradigma que exacerba la realidad, al punto de lo absurdo, consiguiendo la autenticidad de la vida real.
Cameron Díaz logra desagradar con su personaje, entregando un valor agregado, convirtiendo a la desalmada e inhumana profesora en una persona digna de admiración, a pesar de su falta de ética. Con una interpretación notable, donde consigue equilibrar su sensualidad con su actitud grosera y agresiva.
El punto fuerte de Malas Enseñanzas es sin duda la interpretación por parte de su elenco; Lucy Punch como Amy Squirrel (Conocerás al Hombre de tus Sueños), se desmarca por completo de sus actuaciones anteriores, con un personaje lleno de valores positivos que sufre una considerable transición en su conducta. Una actuación creíble y acertada, totalmente opuesto al resultado de Díaz, quien debilita la película con la transformación de su personaje.
Cabe destacar la participación de Phyllis Smith como Lynn (The Office), quien es prácticamente el salvavidas de Cameron Díaz, pero lamentablemente no consigue obtener todo el protagonismo que le corresponde o que se quisiera, desperdiciando un elemento importante que podría haber potenciado aún más a “Malas Enseñanzas”.
La actuación de Jason Segel (How I Meet Your Mother), se mantiene a un ritmo constante durante toda la película, sin embargo Justin Timberlake (Amigos con Beneficios), no logra convencer con su papel. Cae en una simple caricaturización, donde no se aprecia su calidad actoral (si es que tiene una).
La cinta se interna en el mundo de los profesores utilizando todas las herramientas a su alcance, apoyándose en la relación entre estudiantes y docentes, o las relaciones personales entre colegas, sin desviar la atención de su objetivo: la crítica a la construcción social de modelos superficiales y consumistas, donde la felicidad es sinónimo de comodidad, consiguiéndola solo a través del dinero, cayendo en el juego de poner y ponerse etiquetas.
A pesar de su fuerte “mensaje entre líneas”, Malas Enseñanzas pierde su rumbo al intentar concluir la cinta con una “moraleja”, ya que la crítica pierde poder al imponer su enseñanza a través del crecimiento personal de los personajes, dejando sin libertad al espectador de pensar y reflexionar acerca de los valores recopilados en la película.
“Malas Enseñanzas” es una cinta amena, llena de momentos divertidos, con toda la energía del humor negro, con una historia bien planteada y muy bien ejecutada. Aunque no sea una película que trascienda en la historia, deja bien puesto el titulo de comedia; en una película ingeniosa y adulta, que no cae en recursos vagos y burdos para sacar una carcajada.
En gustos no hay nada escrito, pero el cine no es solo diversión; si se es capaz de leer entre líneas, uno puede llevarse al hogar algo más que un grato momento.
Para quienes disfruten del estilo, les recomiendo Un Funeral de Muerte (2007) y Escuela de Rock (2003), los polos opuestos de la buena comedia.
Buena.
Pastitoway.
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