“La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton”: Tremendamente sincera y conmovedora

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Ya se encuentra disponible en Netflix la miniserie de seis episodios “La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton(Queen Charlotte: A Bridgerton Story), el primer spin-off de la exitosa serie “Bridgerton”, que actúa como una precuela, centrándose en el pasado de la Reina Charlotte.

La serie es encabezada por India Amarteifio (Line of Duty) como la Reina Charlotte, Corey Mylchreest (Sandman) como el Rey George, Arsema Thomas (en su debut televisivo) como Agatha Danbury, Michelle Fairley (Game of Thrones) como la Princesa Augusta, Sam Clemmett (Cherry) como Brimsley; y Freddie Dennis (The Nevers) como Reynolds. Además, el show cuenta con la participación de las estrellas de “Bridgerton”: Golda Rosheuvel (Dune) como la Reina Charlotte; Ruth Gemmell (Fever Pitch) como Violet Bridgerton; Adjoa Andoh (The Witcher) como Lady Danbury; y Hugh Sachs (Benidorm) como Brimsley.

Sinopsis: Centrada en el ascenso al poder y la popularidad de la Reina Charlotte, esta precuela del universo Bridgerton cuenta la historia de la unión de la joven Charlotte con el Rey George, que no solo fue una gran historia de amor sino también un punto de inflexión a nivel social, ya que se crearon las tradiciones de la alta sociedad que heredaron los personajes de Bridgerton.

Debo admitir que el personaje de la Reina en las dos primeras temporadas de “Bridgerton” no ha sido de mi agrado. Razón por la que no tenía muchas expectativas con este spin-off enfocado en sus años de juventud. Sin embargo, Netflix ha dado en el clavo, ampliando el universo de “Bridgerton” de una forma que jamás imagine… permitiéndonos conocer una nueva historia, llena de drama, cariño y profundidad; que incluso llega a superar a la serie original en más de una ocasión.

Siendo una especie de temporada 2,5 de “Bridgerton”, este spin-off se posiciona justo en medio de la segunda y la tercera temporada del show original, logrando unir algunos cabos sueltos, tanto del presente como del pasado de este universo. Una oportunidad muy bien aprovechada, pues hace que los sucesos vistos en “Bridgerton” se sientan mucho más naturales y orgánicos para el espectador.

“La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton” es una serie con harta intriga y muy buen ritmo. Si bien, sus episodios bordean los 60 minutos, la historia es muy atrapante y avanza rápidamente, por lo que su duración no es ningún problema… e incluso, te deja con ganas de más.

Su formato de miniserie es un acierto: la temporada contiene solo seis episodios. No obstante, la historia es tan cautivante y el elenco está tan bien elegido, que da pena saber que la serie no continuará. El final es perfecto, pero uno como espectador se encariña tanto con los personajes, que en realidad no me molestaría retomarlos en un futuro.

El elenco completo está sumamente bien elegido, con grandes actuaciones y personajes entrañables. La química entre India Amarteifio (la Reina Charlotte) y Corey Mylchreest (el Rey George) se siente desde el primer momento que estos comparten pantalla y, a diferencia de las parejas que hemos conocido en “Bridgerton”, aquí el amor surge a primera vista, por lo que no se nos cuenta el cómo llegaron a enamorarse, sino más bien, la serie nos muestra los desafíos a los que se ven enfrentados y cómo su amor les permite hacerlo; lo que hace que “La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton” sea la historia más profunda y conmovedora del universo “Bridgerton”.

Si bien, las dos primeras temporadas de “Bridgerton” nos han dejado con finales felices, este spin-off tenía la difícil tarea de terminar con un final agridulce; pues desde un inicio sabemos las condiciones en las que se encuentran el Rey y la Reina. Al respecto, debo decir que “La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton” tiene un final perfecto, el mejor que he visto en mucho tiempo.

En fin, realmente no tengo nada malo que decir. “La Reina Charlotte: Una Historia de Bridgerton” es una de las mejores series de Netflix. Una historia sincera, conmovedora y profunda, con un final sublime y desgarrador. ¡Tremendamente recomendada!

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