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La popular serie «The Crown» tuvo un regreso triunfal este mes de noviembre con su cuarta y muy esperada nueva temporada. Con Olivia Colman (La Favorita) como la Reina Isabel II, Netflix sigue profundizando en la majestuosa y turbulenta vida de la monarquía más famosa del mundo.
Esta temporada destaca por la inclusión de los personajes de Lady Diana Spencer, quien será introducida a través de la actuación de Emma Louise Corrin (de la serie “Pennyworth”); así como también Margaret Thatcher, interpretada por Gillian Anderson (de la serie “Sex Education”).
Sinopsis: Se acerca el final de la década de 1970 y la Reina Isabel (Olivia Colman) y su familia se encuentran preocupados por salvaguardar la línea de sucesión, encontrando una pareja apropiada para el Príncipe Carlos (Josh O’Connor), que sigue soltero a los 30 años. Durante este tiempo se empieza a sentir el impacto de la política divisoria introducida por la primera mujer Ministra de Gran Bretaña, Margaret Thatcher (Gillian Anderson). Además, surgirán tensiones entre ella y la Reina que no harán más que empeorar a medida que conduce al país a la Guerra de las Malvinas, generando un conflicto dentro de la Commonwealth.
Dentro de toda esta vorágine, el romance del Príncipe Carlos con la joven Lady Diana Spencer es la historia de cuento de hadas que el pueblo británico necesita en este momento, pero, tras las puertas del palacio, la Familia Real Británica cada vez está más dividido
Esta cuarta entrega nos viene a mostrar un producto más que consolidado, brillante en su fluidez narrativa y que ha conseguido un éxito incuestionable bajo un esquema que ha mantenido viva la adicción por saber más sobre una de las familias más poderosas del planeta.
Uno de los fuertes que ha caracterizado a The Crown a lo largo de sus temporadas ha sido sin lugar a dudas su reparto. Y es que este aspecto ha sido sencillamente brillante desde los inicios de la producción, partiendo por unas maravillosas Claire Fox y Vanessa Kirby (sumado a un gran Matt Smith), hasta incluir las grandes actuaciones de Olivia Colman y Helena Bonham Carter, que se han convertido fielmente en la mismísima reina de Inglaterra y en su problemática hermana menor.
Ahora, la serie ha incorporado notablemente a personajes más que atractivos; hablamos de la icónica Princesa Diana de Gales y a la todopoderosa Primera Ministra Margaret Thatcher. En ambos casos, las elegidas para su interpretación, las actrices Emma Corrin y Gillian Anderson, personifican tanto física como espiritualmente a sus tremendos personajes, mostrando un manejo exquisito en sus acentos, corporalidad y en la carga que representan sus nombres e historias.
A su vez, los conflictos y la trama desarrollada en esta etapa son magníficos y muy atractivos de principio a fin, centrándose en el romance multifactorialmente fallido entre el Príncipe Carlos y la Princesa Diana, mostrando aspectos que para mucha gente puede ser desconocidos, y otros más cruentos y desgarradores que logran enseñar a qué nivel este matrimonio fue un desastre, en el que muchos de sus protagonistas salieron destartalados.
Esta nueva temporada tiene momentos memorables que se van acompañando de canciones, lugares y otros detalles que dejan una marca registrada para esta continuación, que apenas termina ya promete una quinta parte devastadoramente buena.
Una serie que sigue al pie de la letra la formula que le ha entregado tantas bonificaciones y aplausos y que se sustenta indudablemente por sus montajes, paisajes y vestimentas que han sido muy bien estudiadas y planteadas en escena. Una serie histórica con ribetes de ficción que recomiendo completamente.
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