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De niños todos fuimos encantados por esa niñera llena de magia que llegaba a salvar a una familia que no se sabía perdida. El ser capaz de creer en cosas nuevas y descubrir el mundo con nuevos ojos, sumado a una mezcla de atrapantes colores y canciones, hacen de Mary Poppins un clásico para todas las generaciones.
Sinopsis: En esta secuela, totalmente nueva, que tiene una sensibilidad fresca y, a la vez, celebra el espíritu de la película original, Mary Poppins regresa para ayudar a la nueva generación de la familia Banks a recuperar la alegría y el asombro que perdieron en sus vidas después de haber experimentado una pérdida personal. La enigmática niñera cuenta con la compañía de su amigo Jack, interpretado por Lin-Manuel Miranda (Hamilton, MOANA), un farolero optimista que ayuda a dar luz —y vida— a las calles de Londres.
Al igual que en casi toda secuela, nos enfrentamos a la pantalla llenos de expectativas y ansiedades, así como de altas exigencias. En esta versión renovada de Mary Poppins podemos ver a Emily Blunt ocupar los zapatos de Julie Andrews con excelencia. La actriz tiene el talento y carisma para dar vida a esta nueva Mary, con rasgos propios pero sin olvidar su esencia.
Del mismo modo, Lin-Manuel Miranda se apodera de su rol como nuevo compañero de aventuras de Poppins, el que a todas luces se roba la cinta. Entregándole un toque fresco que incorpora la cultura moderna a través del rap y lo urbano, Jack es más que un personaje secundario en esta cinta, siendo incluso un par de Mary Poppins. Otro de los personajes que destaca en la película es la prima de la niñera, Topsy, interpretado por Meryl Streep; Es que no hay nada que pongan en manos de esta artista que ella no convierta en magia.
Personalmente creo que la cinta no buscaba marcar hitos por si sola, si no mas bien rescatar el espíritu de su antecesora, tarea que logra a la perfección. Es un perfecto homenaje a la cinta estrenada en 1964, llenando tu corazón de nostalgia y gozo con cada escena. El director se encargó de incluir varios homenajes a personajes de la primera entrega– de los cuales el mas emotivo es el papel de Dick Van Dyke- así como de evocar recuerdos de momentos clásicos de la película que mantendrán tu emoción a tope durante todo lo que dura la entrega.
Lo que sí algunos no parecen perdonar es que si bien la música está a la altura del desafío, parece no superarlo por completo. Dentro de todo el repertorio de canciones que posee el film, parece no haber alguna que se gane nuestros corazones y siga rondando nuestra mente por un periodo algo más largo de lo que demoramos en salir de la sala. De todos modos, debo mencionar que sin importar que quizás aunque musicalmente los temas no peguen, las letras tienen todas un mensaje que rescatar.
Lo que menos me gustó fue la inclusión (para mi innecesaria) de un antagonista que no termina de calzar en la historia y que tampoco logra resolver sus conflictos hacia el fin de la cinta. Otro pendiente parece ser la crítica social, ya que pese a estar presente, se encuentra mucho más escondida en esta entrega que en su predecesora.
En cuanto al desarrollo visual, los logros de la animación a la fecha hacen que sin duda la intrusión de este mundo de dibujos sea todo un lujo, lleno de colores y de nuevas formas de explorar el mundo de la fantasía.
En conclusión, «El regreso de Mary Poppins» es una cinta que removerá más de un sentimiento en el corazón de los fanáticos y que acercará a los más pequeños a esta asombrosa historia, y que pese a tener uno o dos tropiezos, dejará más que contentos a quienes se aventuren a vivir un nuevo viaje en compañía de Mary Poppins. No olviden que la cinta se encuentra en cartelera a partir del 10 de enero gracias a Cinecolor Films Chile.
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