[Reseña]»Los Desposeídos»: La ciencia ficción al servicio de Ursula K. Le Guin

Se dice que si te gusta la fantasía y la ciencia ficción, Ursula K. Le Guin es uno de los grandes referentes que no debe faltar en tu librero. Con numerosos premios a su favor y reconocida enormemente por su trabajo en la literatura que enriqueció con su visión fuertemente marcada por el feminismo. Pese a ser ampliamente reconocida por la Trilogía de Terramar, muchas de sus otras obras también son parte icónica de su trabajo: «Los desposeídos» es sin duda una de ellas, publicada originalmente en 1974, reeditada por Minotauro y catalogada como una de sus obras más políticas y reconocida con grandes Premios como Nébula, Hugo y Locus.

Sinopsis: Shevek, un físico brillante, originario de Anarres, un planeta aislado y «anarquista», decide emprender un insólito viaje al planeta madre Urras, en el que impera un extraño sistema llamado el «propietariado». Shevek cree por encima de todo que los muros del odio, la desconfianza y las ideologías, que separan su planeta del resto del universo civilizado, deben ser derribados.

En este contexto la autora explora algunos de los problemas de nuestro tiempo: la posición de la mujer en la estructura social, la complejidad de las relaciones humanas, los méritos y las promesas de las ideologías, las perspectivas del idealismo político en el mundo actual.

«Los desposeídos» es un libro que sigue la historia de Shevek en dos tiempos y planetas distintos, uno es su natal Anarres, en donde se ven reflejados todos sus sueños e inquietudes, mientras en Urras, somos testigos de cómo se reformula todo lo que el creía conocer, explorando sus motivaciones y metas. En ambos somos testigos de cómo el personaje se relaciona y crece emocionalmente, su especial apreciación de las relaciones humanas y los sentimientos, además de su búsqueda en el desarrollo de sus ambiciones profesionales. 

Lo interesante de este libro es que no nos enfrentamos a la ciencia ficción como podemos estar habituados: Con historias llenas de acción en donde la tecnología es una disruptora de la Paz y cuyos efectos sociales son solo consecuencias de este enfrentamiento entre lo futurista y lo conocido, sin necesariamente existir una reestructuración de las sociedades o las culturas. Para Úrsula, es totalmente lo contrario, observamos los avances tecnológicos como un telón de fondo, que ayudan a crecer y  cambiar pero que de forma más importante provocan que las sociedades evolucionen en lo social y se replanteen sus formas de relacionarse entre ellos mismos y con otros mundos. Este es un ángulo sumamente interesante porque nos invita a hacer un paralelo no solamente hacia el futuro sino que derechamente a lo que vivimos hoy en día, siendo inevitable que a medida que avanzamos en la lectura nos cuestionemos y comparemos varios de los escenarios que nos rodean a diario.

Es esto mismo lo que lleva a la autora a dotar a a historia de un gran toque de humanidad. El protagonista en un físico que busca con ahínco el lograr desarrollar una fórmula que revolucione la forma de viajar en el espacio, y por consiguiente, la forma en que los planetas se relacionan. Sin embargo, en esta búsqueda se ve enfrentado a la posibilidad de viajar a otro mundo muy distinto al suyo, en el que es capaz de apreciar la humanidad de forma crítica y reflexiva, dándose cuenta de que algunos de los principios base de su sociedad son en realidad un avance que otros lugares están lejos de alcanzar.

Es así como a través de su viaje cuestiona las formas y objetivos del aprendizaje y el conocimiento, la estructura y las motivaciones de la humanidad, el rol de la mujer en la sociedad, por destacar solo algunos de los temas más relevantes. Sin embargo todo esto lo hace criticando su propio planeta, cayendo en cuenta de que lo prometido no es siempre viable  sino más bien utópico, cuestionando el idealismo y comparando las distintas oportunidades que se ofrecen en base a lo que se conoce. Por consiguiente, todo este viaje a través de un mundo de ciencia ficción está fuertemente cargado de emociones y reflexiones sobre la propia identidad y humanidad, tanto a nivel personal del protagonista como global del entorno que lo rodea.  

Si no has leído a la autora, este es un muy buen libro para comenzar. Pese a que podría ser considerado «denso» por sus características (ciencia ficción cargado de una fuerte crítica social y política), su prosa es bastante amigable e invita a la reflexión en profundidad sin sacarnos de la historia, logrando una mezcla muy equilibrada entre sus elementos. Sin duda es una gran recomendación y un infaltable para cualquier fanático de la fantasía y la ciencia ficción, que gracias al trabajo de Editorial Planeta hoy puedes encontrar reeditado en librerías de todo el país..