Jessica Jones: Heroína por Obligación

Luego de una ardua semana laboral, sin tiempo para maratones en Netflix, al fin terminé de ver Jessica Jones, la serie más oscura del universo televisivo de Marvel.

Jessica Jones está basada en la colección de cómics “Alias”, donde la protagonista, una superheroína retirada, se convierte en detective privada.

Sinopsis: Jessica Jones es una mujer solitaria, algo antisocial e incluso mal educada, que tiene un serio problema con la “bebida”. Huyendo de un tormentoso pasado, se convierte en detective privada, reencontrándose con su peor pesadilla; Kilgrave (David Tennant), un villano que se encargará de destruir la vida de Jones (Krysten Ritter).

Si quieres conocer quién es esta heroína, te invitamos a leer su historia en la nota especial: A.K.A. JESSICA JONES: LA PRÓXIMA HEROÍNA DE NETFLIX

La serie cuenta con un marcado toque femenino, donde las mujeres se apoderan del protagonico; Krysten Ritter como Jessica Jones (en uno de los mejores papeles de su carrera), Rachel Taylor (Transformers), interpretando a Patsy Walker, también conocida como Hellcat y la guapa Carrie-Anne Moss (Matrix), como Harper, una poderosa abogada aliada.

Pero al contrario de lo que muchos podrían pensar (“es una serie rosa”), Jessica Jones se adentra en los terrenos del thriller para contarnos una historia llena de abusos contra la mujer. La dramática situación que viven miles de mujeres al ser maltratadas a causa de un hombre, tanto física como psicológicamente.

Jessica Jones se toma (literalmente), la justicia con sus manos, volviéndose brutal, e incluso sádica con escenas sacadas de “Saw”, donde la sangre inunda la pantalla por completo, por lo que un momento de introspección o incluso un romance, se agradece. En especial para descansar entre tanto drama y alboroto.

La serie cuenta con una serie de guiños referentes al mundo de Avengers, donde el nombre de Daredevil también se hace escuchar, alentándonos a la inminente llegada de su nueva temporada.

Al igual que Daredevil, esta serie posee una estética sombría, donde los fantasmas del pasado se hacen presente para atormentar a los protagonistas, dificultando el proceso de convertirse en superhéroes.  Es aquí donde surge la gran diferencia entre ambas series, dejando a Jessica Jones como el héroe de Marvel más complejo que jamás se haya visto en una adaptación.

Pese a que Daredevil sigue siendo mi favorita, Jessica Jones se ganó todos mis respetos. No sólo por la gran interpretación de Krysten Ritter, o la complejidad de su personaje, sino por mantenerme pegado a la pantalla, sufriendo y sorprendiéndome con cada giro que nos presenta la historia.

 Definitivamente Jessica Jones es una «imperdible» para agregar a tu lista de reproducción de Netflix.