[Crítica] «Una Aventura Extraordinaria»: Creer, Luchar y Vivir

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Sinopsis Oficial: El hijo de un guarda de zoo, Pi Patel tiene conocimiento enciclopédico sobre el comportamiento animal y un gran amor por las historias. Cuando Pi tiene 16 años, su familia emigra de la India a Norteamérica en un buque de carga japonés, y con él viajan animales de zoo que van a sus nuevos hogares. Entonces, el barco naufragia, y Pi va a parar a un bote a la deriva en el Océano Pacífico. Su compañía será una cebra, una hiena, un orangután y un tigre de bengala de 200 kilos llamado Richard Parker; todos luchando por sobrevivir. Es un cuento de fe, esperanza y lucha por la supervivencia.

El ganador del Oscar Ang Lee regresa con todo a la pantalla grande. En esta ocasión, lo hace bajo la dirección de “Una Aventura Extraordinaria”; una historia única, muy bien narrada y rica en reflexiones.

La historia, basada en la novela “The life of Pi” escrita por el canadiense Yann Martel, gira en torno al joven indio Piscine “Pi” Patel (interpretado de gran forma por Suraj Sharma), el cual está en constante búsqueda de su lugar en este mundo y lucha por comprender las misivas que Dios nos ha entregado. ¿Cómo lo hace? Primero conoce la religión que predica su familia, el hinduismo, pero poco después se ve intrigado por otras creencias y va sumando y rescatando los valores más relevantes del catolicismo y del Islam. Tras saber que su familia se mudaría a Canadá para vender gran parte de sus animales del zoo, Pi debe afrontar el abandono de su tierra natal y el de su joven primer amor. Ya en pleno océano Pacifico el barco en el que viaja es arrasado por una gran tormenta, hundiéndolo y dejando como único sobreviviente a Pi en un bote de rescate en medio de la catástrofe y la soledad del océano. Pero para su asombro se ve acompañado de una hiena, un orangután, una cebra y un feroz tigre de bengala mejor conocido como Richard Parker.

La película es una reflexión profunda, atractiva y metafórica de la vida misma, de lo que creemos y sentimos en un mundo que a veces suele tratarnos con empatía y tranquilidad pero que en otras ocasiones es despiadado y tormentoso. La propuesta se basa magistralmente en cómo Pi se ve azotado por la muerte y la desesperanza, pero al mismo tiempo, nos relatará como la compañía de Richard Parker (el tigre) será efectivamente eso…un pilar que lo ayude a superar la soledad y a sobrevivir.

La relación entre Pi y Richard Parker es sencillamente hermosa, es una aventura extraordinaria aparte, en que ambos se ven desligados de su vida, de su ambiente y por ende de su naturaleza. Esta convivencia es un balance entre la vida y la muerte; por un lado este abandono en medio del mar se trata de sobrevivir, de enfrentarse al otro, pero también de mantenerse con vida en conjunto.¿Vivir gracias al otro? Sí, leyó bien, se trata de una dualidad que los sostiene. Los mantiene a ambos alerta (por supuesto más por el lado de Pi, ya que Richard Parker es un Tigre de bengala indómito de al menos 200 KG de peso), los mantiene cuerdos y en este aspecto, Ang Lee hace una pausa y nos muestra que tan frágiles somos y lo mucho que necesitamos de un otro, de una compañía. ¿El refugio es creer siempre en un dios todopoderoso y omnipresente? O por otro lado ¿es  luchar hasta el agotamiento máximo por la vida de uno o del otro? Esta aventura te lleva al límite, te recuerda qué tan valiosa es la vida y lo mucho que deberíamos apreciarla. Como también, de que nunca se debe abandonar la batalla por aquellos a los que amamos.

El efecto 3D va de la mano de Ang Lee, es un aporte fundamental para darle vitalidad a la película. El manejo de los colores nos acerca a un mundo nuevo que varia y pareciera respirar por sí mismo. En una primera instancia nos sitúa en un escenario desconocido que después de un manto lóbrego de tormentas gigantescas, se convierte en algo precioso, repleto de colores y formas capaces de transmitir diversos estados de ánimo, otorgándole a cada uno de los cuadros un lenguaje propio acorde a la reflexión del film.

Para finalizar hay que destacar la gran actuación de Suraj Sharma, el gran protagonista, pues es él quien se lleva el mayor peso de la película y logra cumplir con las expectativas, mostrándose versátil y capaz frente a la diversidad de escenas que se muestran y lo mucho que logra trasmitir en cada una de ellas.

Cornamenta.

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