¿Hablemos de muerte? Tres series que hablan sobre la muerte

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«13 Reasons Why», el más reciente éxito de Netflix, que nos dejó a muchos con una extraña sensación luego de terminar la serie. Con temas como el suicidio, la violación y las drogas, el programa se convirtió en el gran tema de conversación con los amigos.

La serie dejó en evidencia temas que siguen siendo tabú en nuestra sociedad, pese a ser algo tan cotidiano de ver en televisión. Con un relato crudo de la vida real donde la muerte de una joven marca la vida de muchos, generando repercusiones inesperadas, el programa nos reafirma que la muerte sigue siendo un tema difícil de abordar, tanto en la vida real como en un programa de televisión.

Sin embargo hay producciones que se han atrevido a incursionar en el tema, algunas incluso convirtiéndose en todo un fenómeno. Favoritas del público, aclamadas por la crítica, o simplemente mal comprendidas, todas tienen algo que decir acerca de la muerte.

Es por eso, que me tomé la molestia de hacer la siguiente complicación de series que abordan el tema de la forma más tradicional hasta la más descabellada.

DEAD LIKE ME


Sinopsis: «George» (Georgia Lass), es una mala estudiante, una chica sarcástica, rebelde e inadaptada, sin el más mínimo interés en su vida o de quienes la rodean. Durante el descanso de su primer día de trabajo, repentinamente muere por culpa de un retrete caído del cielo. Su muerte, una rápida, extraña y no muy digna que digamos, le ofrece una nueva oportunidad de solucionar sus problemas y tener un propósito en su vida más allá de la muerte.

Reclutada por Rube (Mandy Patinkin), «George» se convierte en una especie de muerte andante, quién deberá ir recolectando las vidas de personas completamente desconocidas, haciéndose responsable de sí misma y aprendiendo a vivir de manera independiente en esta segunda oportunidad que la vida/muerte le regaló.

«Dead Like Me» es una entretenida comedia negra, que pese a su sórdido humor, se vuelve un aperitivo ligero a la hora de hablar de la muerte, en especial con las absurdas formas de morir que vemos en la serie, algo que pese a ser tragicómico,  nos entrega un potente mensaje que nos dice: «La muerte llega cuando menos te la esperas».

La serie, protagonizada por Ellen Muth (Hannibal), Mandy Patinkin (Homeland), y Callum Blue (Smallville), sólo alcanzó a estar al aire por 2 temporadas (2003-2004), obteniendo 2 nominaciones a los Primetime Emmy, por composición musical y efectos visuales.

THE KILLING


Sinopsis: ¿Quien mató a Rosie Larsen? Esa es la gran pregunta de esta serie. Un horrible homicidio que no solo se vuelve en la prioridad de una pareja de detectives, sino que también se convierte en la peor pesadilla para una familia que pierde a su hija.

La serie, protagonizada por Mireille Enos (Guerra Mundial Z), junto a Joel Kinnaman (Suicide Squad), como la dupla de detectives, se convirtió en todo un suceso al incursionar con un formato diferente al antes visto en televisión en un drama policial; la historia se aborda en la temporada completa, donde además podemos ver ambas caras de la moneda; el dolor que enluta a una familia, versus todo el trabajo y sacrificio que implica para la policía realizar la investigación con tal de dar con el paradero del responsable.

Con un escenario deprimente, junto al desplante actoral de Mireille Enos y Michelle Forbes (Prison Break, True Blood), la serie logra brillar con su elenco. Forbes conmueve con su desgarradora actuación como la madre de Rosie Larse, la protagonista de la historia, quien pese a no estar presente del todo, se vuelve la invitada estelar del programa gracias a la actuación de Larse Katie Findlay (How to Get Away with Murder). Cabe destacar además la participación de Billy Campbell (Los 4400), quien sin duda se roba el protagonismo.

«The Killing» es una de las series de crimen más aclamadas del último tiempo, que además de consolidar la carrera actoral de Mireille Enos, y Joel Kinnaman en Hollywood, nos deja con un relato único en su tipo que se vuelve tan adictivo como entretenido mientras se van recopilando las evidencias del caso para descubrir la verdad.

BAKU DAKE GA INAI MACHI (LA CIUDAD DONDE SOLO YO HE DESAPARECIDO)


Sinopsis: Satory Fujinuma, un autor de manga sin mucho éxito, que además trabaja como repartidor de pizzas, sufre de un peculiar fenómeno conocido como «resucitación», en el que se transporta en el tiempo hasta el momento anterior de que ocurra algo que supone un peligro para una vida. Satoru no tarda en descubrir que el fenómeno persiste hasta que la causa de la amenaza desaparece.

Este anime, además de ser uno de los mejores dramas que he visto, posee varias particularidades que saltan a la vista una vez iniciada la serie. Porque no importa cuántas recomendaciones te hayan dado, ni cuantos trailers hayas visto; aquí no funciona el amor a primera vista.

La serie nos lleva por el oscuro camino del asesinato, donde un joven se ve obligado a enfrentar (y enmendar) su pasado con tal de prevenir una muerte en el presente, lo que lo llevará por la senda del héroe, en una especie de descubrimiento personal que cambia el destino de todos, entregándonos un fuerte mensaje de empatía. Ya que nuestro protagonista se da cuenta de lo importante que es hacerse parte e involucrarse en la vida de los demás a modo de ayudar.

Uno de los puntos fuertes de este anime es que cuenta con tan solo una temporada, la que se hace extremadamente corta, ya que solo tiene 12 capítulos de 20 minutos cada uno. Tiempo suficiente para contar la historia, pero no tanto para satisfacer el capricho y la necesidad de querer saber más acerca de los personajes.

Si bien es un drama, «Boku Dake Ga Inai Machi» juega con la ficción al incluir, como eje principal de la trama, viajes en el tiempo, lo que permite desarrollar la historia en un ambiente lleno de suspenso e intriga mientras se intenta investigar y prevenir un crimen.

Con tintes policiales, la historia se vuelve oscura, no apta para menores, lo que permitiría (eventualmente) realizar una versión live-action del anime al más puro estilo de «Stranger Things», pero sin el ingrediente sobrenatural.

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