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Cuatro años han pasado desde el último estreno de Wes Anderson y 11 desde su primera película animada. Así, el director estadounidense regresa en gloria y majestad con un filme único, que no dejará a nadie diferente, con una historia dinámica y emocionante.
Sinopsis: Cuenta la historia de Atari Kobayashi, un chico de doce años pupilo del corrupto alcalde Kobayashi. Cuando, por decreto ejecutivo, todas las mascotas caninas de MegasakiCity son exiliadas a un gran basurero, Atari parte solo en una pequeña avioneta Junior-Turbo Prop y vuela a la isla de basura en busca de su perro guardián, Spots. Ahí, con la ayuda de una jauría de perros callejeros, que se convierten en sus nuevos amigos, comienza un viaje épico que decidirá el destino y futuro de toda la provincia.
Desde su debut con «Bottle Rocket» en el año 2006, Anderson se ha convertido en uno de los grandes directores del último tiempo, con un estilo muy singular que destaca lo visual y con historias protagonizadas por personajes muy especiales.
«Isla de Perros» no es la excepción. Relata la historia de Atari, un joven que emprende un viaje a la isla de basura con el objetivo que encontrar a su perro, Spots. Es ahí cuando conocerá a un particular grupos de canes compuesto por: Chief, Rex, Duke, Boss y King.
La película en sí es preciosa, los colores, personajes, locaciones, todo funciona como un conjunto armonioso, que logra captar toda la atención del espectador. Es una de esas producciones de las que no puedes despegar ni un segundo la vista, porque te puedes perder un elemento vital para el desarrollo.
Además, no se puede dejar de mencionar que la película está realizada con la técnica de stop-motion, lo que significa un doble trabajo para el equipo realizador. Está ejecutada de una forma tan prolija y precisa que alguien sin conocer detalles podría pensar que solo se recurrió a animación digital.
Varios medios especializados han comentado que esta no sería la mejor película de Anderson, pero, logra estar a la altura. Tampoco es apropiado entrar a compararla con «Fantastic Mr. Fox», si bien ambas historias siguen una línea similar, en cuanto al contenido se distancian. Lo mejor es apreciar cada obra del director como un pieza especial, pues se nota que pone todo su esfuerzo y dedicación en crear películas maravillosas que van mucho más allá de lo literal.
Lo más importante de la película, dejando de lado el aspecto visual y dramatúrgico, es el mensaje de fondo. Pues, a simple vista puede parecer que es un argumento bastante simple, un niño que busca a su perro. No obstante, detrás hay muchos temas que se alzan, como la discriminación, corrupción política, abuso de poder y sobre todo el abandono animal.
Como es habitual el director suele trabajar con sus colaboradores más recurrentes y esta no es la excepción, en esta historia acude a ellos y una serie de grandes actores, como: Bryan Cranston (Breaking Bad), Edward Norton (El Club de la Pelea), Bill Murray (Perdidos en Tokio), Jeff Goldblum (Parque Jurásico), Scarlett Johansson (Ghost in the Shell), Greta Gerwig (Frances Ha), Frances McDormand (Tres anuncios por un crimen), Tilda Swinton (Tenemos que hablar de Kevin), F. Murray Abraham (Amadeus), Harvey Keitel (Perros de la calle) y Liev Schreiber (Ray Donovan).
Otro elemento que la convierte en especial es su banda sonora, que está a cargo de Alexandre Desplat, el mismo que se llevó un galardón en la última edición de los premios Oscar, gracias a su composición en la cinta «La Forma del Agua».
Una película que todos deberían ver, pues la sensación que deja al terminar de verla es indescriptible, logra jugar con nuestras emociones y divertirnos al mismo tiempo. Wes Anderson lo ha logrado nuevamente.
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